Publicado el 1 de abril del 2020

“Son tiempos de mirarnos hacia adentro, pensando en los de afuera”

Foto principal
Campartilo en tus redes sociales favoritas:

El Obispo Diocesano de la ciudad petrolera, Joaquín Gimeno Lahoz dijo que el aislamiento nos impone la reflexión sobre nuestros actos, estar en familia y cumplir con la oración. "Es el tiempo para elegir lo que cuenta, verdaderamente y lo que pasa, para separar lo que es necesario de lo que no lo es”, aseveró.

En contacto con el programa “Línea Abierta”, el representante del clero en Comodoro Rivadavia, se explayó en torno a los difíciles momentos que estamos atravesando y llamó a la unión de todos los argentinos. “Es un tiempo totalmente insólito para todos nosotros, pero independientemente nos da muchas posibilidades de gustar las cosas de cada día, que normalmente no las gustamos porque estamos acelerados y con un montón de cosas que hacer”.

El Obispo mencionó que el aislamiento preventivo nos debe servir para “tener más tiempo para compartir con la familia, una buena lectura y para la oración, y por medio de las relaciones virtuales, de poder preocuparnos de lo que pasa a nuestro alrededor” y agregó que “debemos mirarnos hacia adentro, pensando en los de afuera”.

El parate obligado, interpretó Lahoz que “es algo que nos permitió a todos, parar un poco, ya que vivimos apurados sin saber adónde vamos, y siempre corriendo”.

Rescató que en estos días “han estado al pie del cañón” muchos laicos y las parroquias que “han ejercido el ministerio de la escucha, justamente para personas que están solas y aquellas que lo pasan muy mal, porque la poquita salida que hacían, no pueden hacerla y no tienen quién les vaya a comprar”. En este sentido, recalcó: “Hay mucha atención de muchos voluntarios en general, que se ocupan y preocupan de estas cosas para hacer más llevadera a esta cuarentena que sabemos cuándo comenzó, pero no, cuando terminará del todo…”

Nuevos tiempos

En este contexto, el máximo exponente de la Iglesia en Comodoro Rivadavia, relevó que, una vez superada la pandemia “deseamos que vengan nuevos tiempos, ya lo dijo el Papa (Francisco) nos llama a todos, a tomar este tiempo de prueba, como de elección, no es el momento de tu juicio sino de nuestro juicio. Es el tiempo para elegir lo que cuenta, verdaderamente y lo que pasa, para separar lo que es necesario de lo que no lo es”, aseveró.

“Evidentemente esta situación nos mueve el piso a todos, porque pensábamos que estábamos en lugares seguros y establecidos y como sociedad, ‘dueños del mundo’ y nos damos cuenta que un amigo invisible, o un enemigo invisible, mejor dicho, nos pone en jaque a toda la humanidad”, evaluó Lahoz, en referencia con los desafíos y las oportunidades que esta crisis de proporción mundial, nos debe representar a todos.

Observó que este enemigo común (representado en el COVID-19) ha unido a los cinco continentes y que “estamos embarcados en el mismo lugar, y uno no puede decir a mí no me va a pasar nada, sino lo que tiene que decir, es qué debo hacer, para que no le pase a nadie…”

“Ojalá este hago sentir el llamado constante de Francisco, y que ha repetido estos días, para que se terminen de una vez las guerras en este bendito mundo que está aguantando un montón de desastres de parte nuestra y este desastre nuestro, ha hecho que posibilite su recuperación el mundo, y de poder mejorarlo a pesar nuestro”, concluyó.